Las métricas de Instagram no son sólo el número de seguidores, ni tampoco los likes, los comentarios o el total de entradas compartidas y guardadas que vemos al final de cada publicación.
Los comentarios y los compartidos nos dan información sobre la calidad o el valor de nuestras publicaciones (son interesantes para nuestro público) y el engagement, la relación de compromiso con nuestra comunidad.
Si queremos conseguir los objetivos que nos hemos marcado, monitorizar y medir nuestras acciones en redes sociales es tan importante como tener una estrategia digital adecuada. Sin hacer un seguimiento y monitoreo apropiado no sabremos el rendimiento de nuestras publicaciones y si nos acercamos o no, y con qué velocidad, hacia nuestros objetivos.
¿Qué otros indicadores debemos tener en cuenta para comprobar si vamos por buen camino? En este artículo te mostramos los indicadores básicos que no debes perder de vista en Instagram.
Audiencia
La audiencia mide el tamaño de nuestra comunidad. Con este indicador calculamos y registramos su evolución en el tiempo.
A partir de los datos de partida al inicio de nuestra estrategia, medimos y registramos su evolución. Podemos comparar el resultado que hemos alcanzado con los de estrategias pasadas y aprender qué funciona mejor, lo que genera mejores resultados y qué nos interesa potenciar o evitar.
En marketing, como en ciencia, hay un cierto componente de ensayo y error necesario para llegar a conseguir esa diferencia significativa que nos haga seguir creciendo, pues existen infinidad de variables ocultas de mercado e imponderables psicológicos que no podremos controlar de manera activa.
Sin embargo, el valor real del volumen de nuestra audiencia debe acotarse por la calidad de la misma. No es lo mismo un seguidor pasivo, con poca participación y que utiliza su cuenta para curiosear sin interactuar, que un usuario activo interesado en el contenido que le estamos ofreciendo y que además es fiel a nuestra marca porque se identifica con nuestra propuesta de valor. Tampoco tiene el mismo peso un seguidor no geolocalizado que otro dentro de nuestro margen de actuación si nuestro producto o servicio depende de una interacción presencial concreta. Desde esta perspectiva, crecer en audiencia debe basarse en aumentar seguidores de calidad, esto es, activos y con posibilidades reales de convertirse a clientes. Ambos parámetros, cantidad y calidad, son clave para optimizar nuestra evolución.
Si no puedes medirlo, no puedes dirigirlo
Peter Drucker
Impresiones o impacto
Es el número de veces que se han visto tus publicaciones, reels, vídeos o historias. Hay que tener en cuenta que un usuario único puede haber visto cada publicación más de una vez, lo que tiene que interpretarse dentro de su contexto.
Si tu publicación es muy específica, como por ejemplo, un tutorial sobre un inhalador respiratorio, es posible que tenga más impresiones porque los mismos usuarios necesitan verla varias veces para ponerla en práctica. Si se trata de un mensaje sencillo, como un consejo sencillo de salud, probablemente no sea necesario volver a visitarla. Por tanto, muchas visualizaciones no equivale necesariamente a más audiencia, pero puede ser una medida de interés por un segmento concreto de ella.
Alcance
Es el número de cuentas únicas, (seguidores y no seguidores) que han visto cualquiera de tus publicaciones, vídeos, reels o historias.
En este caso sí que medimos el número de cuentas expuestas a nuestro contenido. Con ello podemos saber si nos estamos expandiendo fuera de nuestro público habitual. Evidentemente, lo deseable es llegar a todos nuestros potenciales clientes y eso supone «alcanzar» a cuentas que actualmente no saben de nuestra existencia, al margen de fidelizar a las que ya nos siguen. De la misma manera que con las métricas anteriores, no siempre más es mejor; si llegamos a muchas cuentas a las que no les interesa nuestra propuesta, la rentabilidad será nula. Por eso la estrategia inicial debe identificar perfectamente a nuestro cliente para entender dónde está y cómo podemos hacer que nos encuentre.
Visitas al perfil
Es el número de veces que se ha visualizado tu perfil.
Las visitas al perfil pueden dar una idea del interés que generamos en saber quiénes somos. Es una acción voluntaria y no solicitada que muy probablemente se produzca tras un impacto generado en una cuenta que hasta ahora no nos conocía pero a la que hemos alcanzado y a la que además le hemos despertado la curiosidad.
¿Ves cómo se relacionan las métricas entre sí?
De ahí que sea tan importante tener optimizado nuestro perfil y que esa persona no solo no pierda el interés, sino que pueda conocernos y así establecer una relación positiva para ambas partes.
Si tenemos un perfil confuso, con fotos de baja calidad o donde no quede claro quiénes somos o qué problema resolvemos, si no transmitimos confianza, perderemos audiencia de calidad, y ya sabemos qué significa eso.
Clicks o toques en el sitio web
Es la cantidad de clics en la página web que aparece en el perfil.
Si lo unimos a lo anterior, resulta evidente la importancia de tener una web optimizada y adaptada a nuestros potenciales clientes. Piensa que en este punto tenemos a una persona que ciertamente tiene interés y es activa, pues avanza más allá del perfil y sigue buscando información. Si nuestra página es un pozo negro lleno de confusión, o no está adaptada para uso en dispositivos móviles, probablemente nuestro cliente se esfume en segundos. Recuerda que los tiempos en el mundo digital son muy diferentes y que cada usuario está expuesto a infinidad de estímulos. Necesita respuestas rápidas y sencillas, no tener que resolver un acertijo cada vez que entre en nuestro hogar virtual.
Clicks o toques en el botón “correo electrónico”
Es el número de clicks con la intención de enviarte un email.
No insisto más en la importancia de que detrás de este botón no haya fricción de ningún tipo y que sea muy sencillo contactar con nosotros. Una medida clara del interés que generamos.
Registrando y monitorizando estos indicadores podemos identificar picos de actividad en nuestro perfil, qué publicaciones o qué tipo de contenido obtienen mayores resultados, cuáles nos llevan a conseguir más visitas en nuestra web o a recibir más correos.
Con los resultados en la mano podemos analizar el rendimiento de nuestra estrategia de contenido y adaptarla para dirigir el barco hacia el puerto elegido.
¿Qué métrica es la más importante?
Ninguna es mejor o peor. Todas aportan información y según el objetivo marcado se utilizan unas u otras. Siempre deben interpretarse en su conjunto y entendiendo que el contexto marca el significado de los datos en crudo.
La realidad es que estamos analizando un paisaje muy amplio y complejo desde diferentes ángulos y perspectivas.
No siempre es fácil marcarse objetivos asumibles ni establecer las métricas oportunas (te hemos hablado de algunas, pero hay muchísimas más). Pero, sin ellas, el viaje por las redes sociales se convierte en una travesía del desierto sin brújula ni destino final, lo que supone una pérdida de tiempo y de recursos que no te puedes permitir.
Y lo peor, que ni tú ni tu cliente lleguéis a conoceros.
O, que en caso de que entre por la puerta de tu casa digital, no sepa ni dónde está ni qué hace allí.
Desde Comunicación Digital para la Salud resolvemos ese problema, ayudándote a definir unos objetivos razonables y factibles, creando la estrategia para alcanzarlos y estableciendo todas las métricas necesarias para monitorizar resultados y que tus clientes, finalmente, lleguen a tu casa y se encuentren cómodos y confortables.
¡Gracias!